Encomiendo a ti, Señor, a todos los seres queridos que han fallecido y se encuentran en el purgatorio. Te ruego que los bendigas con tu simpatía eterno y que les concedas la Agudeza de la salvación. Que sus almas encuentren paz y descansen en tu misericordia.El hombre respondió: “Todo lo que doy es mi propia ofrenda. No se alarme. No soy rico